Cuento "Toquín"

Toquín

Una tarde de verano, Alexandra, una niña de 17 años, fue con su mejor amigo a un toquín en el que tocaría la banda local favorita de ambos, su mejor amigo, llamado Edmond, tenía 20 años. Alexandra toda su vida había vivido en México, pero sus padres son alemanes, en cambio, Edmond nació en Alemania y ya llevaba 10 años de su viva viviendo en México. Al terminar el toquín decidieron ir a cenar a un restaurante que estaba cerca del lugar del evento. Mientras cenaban, Alexandra se animó a hacerle una conversación diferente a las que siempre hablaban después de un toquín. Comenzó ella preguntándole qué le gustaría hacer en un futuro, a lo que él le contestó que quería graduarse de la universidad y poder tener un trabajo fijo y poder declarársele a la niña que le gustaba. Ella se quedó algo impactada por esta pregunta ya que Edmond no acostumbraba a hablar mucho sobre sus sentimientos. Las preguntas fueron saliendo conforme este respondía, hasta que llegó a la pregunta de ¿te gustaría irte a vivir otra vez a Alemania? a lo que Edmond, sorprendido por esta pregunta, le respondió “No, ya tengo mi vida hecha aquí, aquí están todos mis amigos, estás tú, mi mejor amiga y está la persona a la que más quiero”. Después de esto, se dirigieron al carro de Edmond donde habían llegado al toquín y condujo lentamente con la radio encendida y el CD de “Epica” puesto a un volumen moderado, no se hablaron los primero 8 minutos del viaje, pero después de ese tiempo, él se animó a romper el silencio algo incómodo ya. “¿Quieres ir conmigo a Alemania? mis padres están planeando ir a visitar a la familia dentro de una semana, sería genial que pudieras venir con nosotros” esta noticia le agradó mucho a Alexandra, la cual contestó inmediatamente “¡Claro que me gustaría ir!, pero tengo que pedir permiso, y… ¿Dónde me quedaría?”. Después de contestar a todas sus dudas, la dejó en su casa, a lo que antes de que se bajara del coche, le dio un beso en la orilla de los labios y ambos se sonrojaron. En el transcurso de esa semana, Alexandra llamó a Edmond por teléfono para darle la noticia de que si la habían dejado ir. Ya toda emocionada, hizo su maleta con roja suficiente para 1 mes de vacaciones. Ya en el aeropuerto los papás de Edmond se sentaron juntos y Edmond y Alexandra se sentaron atrás de ellos también juntos. Una vez que llegó la noche y ambos estaban ya cansados, se acurrucaron y Edmond le dio un abrazo a ella, acurrucándose en su hombro, le susurró al oído “Creía que me preguntarías quién es la niña que más quiero” a lo que ella sorprendida por el tema recién iniciado le respondió “No pregunté porque nunca hablas de tus sentimientos, me pareció indebido hacerlo, pero si quieres puedes contarme lo que tú quieras, por algo eres mi mejor amigo”. Tras una pausa de cinco minutos, él le dijo “Eres tú, te quiero mucho, desde que te conozco me has apoyado, eres la única que ha estado ahí cuando más necesito a alguien, me gustaría que fuéramos algo más”. Después de esto, en respuesta ella le dio un beso en los labios con el cual sellaron su cariño y amistad.